Para nosotros, la manera más directa en la que podemos mejorar nuestra salud comiendo al mismo tiempo que cuidamos de la Madre Tierra es ofrecer productos 100% orgánicos y, en su mayoría, basados en verduras y hortalizas cultivadas en un ambiente respetuoso y consciente. Así es como creemos formar parte de la solución. Cualquier contribución, por pequeña que sea a esta solución, acabará provocando una gran diferencia en cuanto a la salud de nuestro planeta.
¡Y menudo planeta milagroso que es! La perfecta ida y venida de las estaciones, las distintas mareas, las lunas crecientes y menguantes. Cada ciclo nos trae sus propios regalos de abundancia. Tan milagroso es que incluso la fruta y la verdura en su punto perfecto de recogida cuando está más jugosa y deliciosa, también se encuentra en su punto nutricional álgido. ¡Exactamente lo que nuestro paladar y nuestro cuerpo necesita!
La mejor manera para sintonizar con este gran ciclo vital mágico es ponernos manos a la obra y cultivar nuestra propia comida. Cuando la huerta y la cocina se unen producen una maravillosa alquimia. Los restos orgánicos de la cocina se convierten en un rico suelo donde las plantas crecen. Y los cultivos se convierten en la principal inspiración de la cocina.
La versatilidad de las plantas que cultivamos y comemos es infinita: existen muchas maneras en las que podemos transformarlas en multitud de platos, muchas maneras de conservarlas, secándolas, fermentándolas… Incontables maneras de explorar los ingredientes, que no son por sí solos deliciosos, si no que nutren nuestros cuerpos e incluso nos ofrecen soporte para curarnos de enfermedades importantes.
Creemos que, si comemos bien, si comemos de la forma que nuestro Creador tenía previsto para nosotros, nuestro cuerpo responderá en consecuencia: en forma y con más energía, unos ojos con chispa, una mente clara, más en línea y con más sensibilidad hacia las fuerzas de la naturaleza que nos mueven.
El resultado es un apasionante y gratificante viaje gastronómico en una cocina dinámica y con vida propia. Los ingredientes orgánicos y naturales se convierten en los actores principales para completar su potencial. Cuando esos ingredientes brillan por sí mismos, te impresionarán constantemente, mejorándote e inspirándote y, lo mejor de todo, lo harán de la manera más deliciosa.